martes, octubre 3, 2006
last.fm
Un día me di cuenta que en la firma de Matthew aparecía una liga a last.fm y me puse a investigar qué es eso. Me encontré con un servicio muy interesante.
Podría decir que es un servicio de redes sociales con un algoritmo colaborativo de filtrado (algo así dice wikipedia), pero ¿qué es eso? mejor trataré de explicar cómo funciona.
Como miembro de last.fm tienes acceso a varios servicios, que puedo resumir básicamente en 3 puntos.
- Puedes escuchar música gratuitamente. Tu no escoges la música, pero si puedes decir de qué género, o bien puedes elegir uno o más artistas y last.fm te sugiere música de esos artistas o muy similar. Hay otras formas de solicitar música que explicaré más abajo.
- Puedes usar last.fm para que éste determine tus preferencias musicales por medio de estadísticas de la música que escuchas en tu computadora o en tus dispositivos portátiles. Mientras más música escuches, last.fm tiene más información sobre tus gustos musicales. Esa música es tanto la que escuchas gratuitamente como la que tu tienes ya sea en cd, mp3, o cualquier otro formato.
- last.fm crea un sitio con información sobre la música que escuchas y otra información relacionada. Como convención en el resto de esta entrada llamaré a ese sitio «perfil de usuario», aunque no es exactamente un perfil de usuario.
Lo interesante es la combinación de los dos primeros servicios. Por ejemplo, con el análisis de tus preferencias musicales last.fm busca otros usuarios con gustos similares (tus vecinos musicales) y entonces puedes pedirle que te sugiera música en base a la que escuchan tus vecinos, lo cual te permite escuchar música que a lo mejor no tienes o que a lo mejor ni conoces, con un alto potencial de que sea de tu agrado. Y algo práctico es que si algún tema no te gusta puedes marcarlo para no volverlo a escuchar en el futuro, por el contrario, si algún tema te gusta mucho, lo puedes marcar, ya sea para recordarlo, o simplemente para ayudarle a last.fm a conocer tus gustos.
En last.fm también se pueden crear grupos o comunidades de usuarios y entonces analiza los gustos músicales del grupo, es decir analiza la música que escuchan todos los miembros del grupo. Y por supuesto le puedes pedir que te sugiera música de la que escucha el grupo. Eso es muy interesante porque te da una idea global de los gustos de una comunidad, por ejemplo yo me hice miembro del grupo de la UNAM, el de Carleton, y el de Silvio Rodríguez. Cada grupo tiene su página. last.fm también crea grupos de fans automáticamente, esto es, si escuchas mucho a un artista, automáticamente te conviertes en su fan. Para escuchar la música de un grupo no tienes que ser miembro del grupo.
Otra característica de last.fm es que te permite asignarle etiquetas a los temas que escuchas. Así mismo puedes escuchar música de acuerdo a las etiquetas asignados a los temas. Otras opciones que tienes en last.fm son: hacerte amigo de otros usuarios, solicitar que te sugiera música en base a la que escuchan los vecinos de otros usuarios, sugerirle música a otros usuarios o grupos, publicar texto, participar en discusiones, crear listados de los temas, artistas y discos que más escuchas, publicar esos listados en tu blog (por ejemplo la barra lateral de este blog), crear estilos para la publicación de los listados, etc. Además, pagándo 3 dólares al mes puedes: crear estaciones de radio (no sé cómo funciona, pero sé que por lo menos puedes crear una estación de radio basada en tus preferencias y otra estación basada en los temas que has marcado que te gustan mucho), solicitar música en base a los gustos de otro usuario, revisar que usuarios han visitado tu perfil de usuario en last.fm, quitar los anuncios en tu perfil de usuario, y algunos otros.
Existen otros sitios que ofrecen servicio de sugerencia musical basada en un artista o en un género musical (como Pandora.com, o LAUNCHcast), no he encontrado otros sitios que ofrezcan el servicio de llevar estadísticas de tus gustos musicales (en Pandora, conforme escuchas puedes decir «esta si me gustó» o «esta no me gustó», y en base a eso define tu gusto musical, pero no lo hace automáticamente, necesita la interacción del usuario). Por otro lado, mercora es un servicio que te permite buscar música para escucharla, o compartir tu colección de música con otros usuarios (para que la escuchen en línea nada más). Todos esos servicios son interesantes, pero desde mi punto de vista tienen muchas desventajas comparados con last.fm. Pandora por ejemplo sólo pueden usarlo legalmente personas que viven en E.E.U.U. y sólo lo puedes escuchar en la página de Pandora, además como dije arriba, no lleva la estadística automáticamente. Mercora suena interesante, pero también tiene limitaciones en cuanto al uso de software y sistema operativo. LAUNCHcast te pone comerciales mientras escuchas en su servicio gratuito. En fin, hasta ahora ningún otro servicio ofrece todas las virtudes de last.fm. Además, como se menciona en otro blog, algo que hace una gran diferencia entre last.fm y otros servicios de sugerencia musical, es que last.fm te sugiere en base a lo que escuchan otras personas, mientras que los otros servicios te sugieren en base a estereotipos predefinidos.
Sé que se puede usar Pandora con last.fm, el primero para descubrir música y el segundo para llevar la estadística. Me parece interesante y creo que lo voy a intentar pronto. Creo que con un poco de ingenio también debe ser posible usar los servicios mencionados con last.fm.
Además de todas las ventajas que ya he mencionado, un factor que fué determinante para comenzar a usar last.fm es que es independiente del reproductor que usas para escuchar tu música, en general eso significa que en la mayoría de los casos puedes seguir usando tu reproductor favorito, en partícular eso significa que no me obliga a usar windows o cierto navegador para utilizar last.fm. Y si, hay varios programas en linux que interactúan con last.fm.
Y ya que hablamos de eso, voy a explicar cómo se usan los servicios de last.fm. Como dije al principio, hay que registrarse, y es gratis, al menos el servicio gratuito me parece muy bueno. Puedes accesar al servicio de sugerencia musical directo desde tu perfil de usuario en last.fm, o bien desde algún reproductor de medios (media player), opcionalmente se puede bajar gratuitamente un reproductor desde el sitio de last.fm. Accesar a la música desde tu perfil es tan sencillo como buscar un artista, genero, o etiqueta, o dar click en un listado. Eso mismo se puede hacer con algunos reproductores, pero no todos. amarok (lo empecé a usar por que habla last.fm) te permite accesar a los listados y en la última versión agregaron la sugerencia por etiquetas.
Para llevar la estadística necesitas que tu reproductor lo soporte, a veces por medio de un plugin. Sólo configuras al reproductor para que le diga a last.fm qué estás escuchando.
last.fm actualiza en tiempo real el listado de música que estás escuchando (hay algunos tiempos de espera y reglas, pero es básicamente instantáneamente). Además, cada semana actualiza los listados de temas, artistas y temas más escuchados. Esa información y mucha más se puede accesar desde tu perfil de usuario. Pero, como pueden ver en la barra lateral, puedes publicar esos listados en tu blog, last.fm ofrece diferentes maneras de hacerlo. Yo elegí hacerlo por medio de imágenes generadas por last.fm por muchas razones, pero lo que quiero subrayar es que last.fm te permite crear el diseño de las imágenes, en mi caso diseñé las imágenes para que fuesen acordes al concepto del blog.
No sé desde otros reproductores, pero desde amarok no se pueden agregar etiquetas a los temas (a lo mejor en versiones futuras), tengo que ir a mi perfil de usuario a hacerlo, y me da flojera por lo que no lo he hecho. Pronto voy a probar songbird.
Generalmente lo que hago es que en casa escucho la música que tengo a fin de que last.fm conozca mis gustos, mientras que en la universidad escucho lo que last.fm me sugiere. Como pueden ver, estoy muy contento con last.fm. Si son miembros de last.fm o deciden probarlo no olviden en agregarme como amigo 😉
domingo, octubre 1, 2006
Escuchar música
Desde que tengo memoria, escuchar música es una de las cosas que más disfruto en cualquier momento. Supongo que lo heredé de mi papá quien no sólo disfruta la música, sino que tiene bastantes conocimientos musicales y un gusto muy amplio. Mis gustos musicales, sin embargo, están influenciados no sólo por mi papá, sino por la radio y en una gran medida por mis amigos.
Por una u otra razón mi colección de música siempre ha sido reducida. Se puede decir que sólo cuento con lo más, más indispensable. A algunas personas les parece que tengo demasiada música, pero a mi me gustaría tener toda la música que me gusta para poderla escuchar cuando se me antoje. Además me gustaría poder conocer música nueva igual, cuando se me antoje. La radio nunca me ha satisfecho como medio para conocer música nueva porque está limitada a la música comercial. Mi mejor fuente de música nueva siempre han sido mis amigos.
No sé en qué momento de mi vida la música comenzó a quedarse relegada. Supongo que fue cuando comencé a estar más y más ocupado. En mis trabajos siempre ha sido complicado escuchar música, digo uno no va a escuchar música al trabajo, verdad? pero dado que a veces las circunstancias se prestan, lo he intentado. La última vez que lo hice fue un desastre, a la semana de que puse bocinas en mi escritorio todo mundo hizo lo mismo con 3 consecuencias desagradables: que había un escándalo, no se podía escuchar música tranquilamente y luego prohibieron las bocinas. Podía usar audífonos, pero además de sentirme como perro con correa, nunca he encontrado audífonos cómodos. Por la misma razón, entre otras, nunca me ha sido cómodo el uso de dispositivos portátiles (walkman y similares).
Consecuentemente hace mucho que no compro discos. Casi estoy seguro que el último que compré fue Mariposas (1999) de Silvio Rodríguez, y lo compré después de años de no comprar discos. De hecho lo he de haber comprado tan sólo porque la música de Silvio realmente me gusta mucho, ya que no simpatizo con los exorbitantes precios de los discos, pero esa es otra historia.
Llegó un momento en que escuchar música se convirtió en una actividad inusual, y eso no resultó muy saludable que digamos. Un día le comenté eso a Tere y tratamos de escuchar música. Una ocasión en carretera notamos que conduzco mucho más relajado cuando escucho música. Cuando venimos a Canadá tenía el firme propósito de comprar un minicomponente, pero después de comprar un lector de DVD y bocinas (muy baratos, por cierto) lo vi innecesario. Pero mi reducida colección (han de saber que lo único que traje son archivos mp3 de algunos de mis discos, los discos se quedaron en México) y mi falta de costumbre no ayudaron a incrementar la frecuencia con que escucho música.
Hace unos meses compré uno de esos tocamúsica portátiles con radio fm y grabadora. La idea era poder escuchar música mientras me traslado y también poder grabar la voz de mi pequeño. Creo que le he dado buen uso al aparatito, pero aún tengo el problema de los audífonos. Parece que la solución la encontré cuando fui a Vancouver. En los vuelos de Air Canada te regalan unos audífonos desechables que se cuelgan en las orejas. Me parecieron mucho más cómodos que los de diadema o los que se introducen en las orejas. He usado esos audífonos con éxito durante un tiempo, pero no están diseñados para durar mucho tiempo y la calidad es muy pobre. Acabo de comprar unos audífonos (y pilas recargables) y espero ahora poder usar el tocamúsica más consistentemente.
Por otro lado, ahora que el sonido en Tlahuilli funciona bien, procuro escuchar música cuando estoy trabajando en casa siempre que las circunstancias lo permiten. Algo que me está ayudando mucho a mejorar mi hábito de escuchar música es el descubrimiento de last.fm, a lo cual dedicaré mi próxima entrada.
Deseenme suerte en mi intento por adquirir una saludable costumbre de escuchar música. 😛
Mi Doctorado en Ciencias Cognitivas 